Estar en los lugares de los que todos quieren huir y retratar los momentos más duros de una guerra. El fotorreportero Ricardo García Vilanova recoge en su último libro, 'Fade to Black. Ascenso y caída del califato del ISIS' los nueve años de horror del califato de Dáesh en Libia, Siria e Irak.
"Es la primera vez que veo cómo un niño está muerto directamente con un impacto de bala en la cabeza, era un francotirador, era evidente. Todo este tipo de cosas, yo venía de otras guerras pero no las había visto nunca antes", explica Ricardo García Vilanova.
Los niños que sobreviven plasman su infancia en dibujos. Escenas de sufrimiento, de bombardeos, de ejecuciones que muchos han visto con sus propios ojos. "Es importante sensibilizar y explicar todo ese contexto para que el resto de personas, que han tenido la suerte de nunca haber vivido situaciones de estas tan horrorosas, puedan al menos percibir un atisbo de lo que significa estar envuelto en una situación como esta", asegura Vilanova.
Un horror que él ha vivido muy de cerca. Y es que, en diciembre de 2013 se hizo público que llevaba tres meses secuestrado junto al periodista Javier Espinosa. Tras ser liberado después de seis meses de cautiverio, García Vilanova ha vuelto en varias ocasiones a Siria.
Una de ellas para entrevistarse y fotografiar a dos de su captores que hoy, están detenidos. "Es curioso, es la contradicción de muchos de los componentes de ISIS. A la hora de la verdad no son capaces de entregar sus vidas por ese proyecto que dicen creer. Eso demuestra que sus creencias no son tan fuertes como dicen que son", defiende Vilanova.
Esa es la penúltima fotografía del libro. Y la última es la del fin del Califato de un grupo terrorista que, a pesar de no tener territorio, sigue representando una amenaza.