El FBI ha devuelto un cuadro del pintor holandés Salomon Koninck de 380 años de antigüedad a sus legítimos dueños, una familia francesa judía, 75 años después de que fuera robado por los nazis durante la invasión de Francia en la Segunda Guerra Mundial.
La obra, 'A Scholar Sharpening His Quill', pintada por Koninck en 1639, fue entregada a los Schloss en una ceremonia que tuvo lugar en el Consulado de Francia en Nueva York, a la que asistió el ministro de Exteriores galo, Jean-Yves Le Drian.
Presentes en la ceremonia estaban los bisnietos de Schloss, Laurent y Michel Vernay, así como su nuera, Eliane Demartini, que describieron la devolución de la obra como una "pequeña victoria" y recordaron que aún hay muchas piezas de arte que fueron robadas y no han sido encontradas.
El representante de la administración francesa destacó que su país continua con sus esfuerzos por acelerar la identificación y restitución de las obras robadas durante el régimen de Hitler, y apuntó que más de dos tercios de las 100.000 piezas usurpadas por los nazis fueron encontradas poco después del fin del conflicto.
El resto, apuntó, no han sido encontradas, pero Francia "nunca se ha rendido en su búsqueda".
"Algunos habrán sido destruidos, pero sucede, con el paso del tiempo, que las obras que fueron escondidas por los ladrones reaparecen en el mercado, como sucedió con la obra de Koninck", dijo el ministro galo.
Vanessa Schneider recuerda a su prima Maria
Maria Schneider más allá de la violación que destrozó su carrera y la hundió en las drogas: "He tenido una vida bonita"
La violación que sufrió en el rodaje de 'El último tango en París', perpetrada por Marlos Brando e instigada por Bernardo Bertolucci, marcó la vida de Maria Schneider, contada ahora por su prima Vanessa.