En la peor escalada de tensión de los últimos meses, Israel y Hamás han aceptado una tregua en la franja de Gaza para que se celebre el evento, que para muchos va más allá de un simple concurso musical.
El representante español en Eurovisión 2019, Miki Núñez, ha realizado su segundo ensayo en Tel Aviv ante la mirada atenta de periodistas de todo el mundo, que se animaron a bailar y aplaudieron al ritmo de 'La venda'.
La canción que representará a España en esta edición del festival generó un clima alegre entre los presentes, sorprendidos por la peculiar escenografía escogida por el equipo español.
El cantante y los bailarines que lo acompañan interpretaron la canción tres veces, con la energía que los caracteriza y con un espectáculo de luces impactante que hizo lucir aún más el edificio y la marioneta que aparece en su actuación.
"Hoy a sido de verdad increíble, hemos acabado y estábamos todo emocionados y llorando", expresó Miki en una rueda de prensa posterior al ensayo, en que aclaró que "hay cuatro o cinco detalles que cambiar, a lo mejor de cámaras, de luces, dar mas brillo aquí o menos brillo allá".
Tras realizarse un sorteo, se ha sabido Miki actuará en la segunda parte de la final, y en este tramo de la gran gala le acompañarán Francia, Italia, Reino Unido e Israel.
Con respecto a su estancia en Tel Aviv, Miki lamentó no haber tenido tiempo de conocer la ciudad por sus distintos compromisos y actividades, pero remarcó que está muy contento en la urbe israelí, que describió como parecida a Andalucía y como un lugar en el que "hace muy buen tiempo y la gente es cercana".
Otro de los temas a los que se refirió es la marioneta que lo acompaña en el escenario, llamada Paco, sobre la cual dijo que "representa al sistema, que te quiere moldear", y bromeó sobre la posibilidad de prenderle fuego como en las fallas de Valencia.
