Vino o cerveza; playa o montaña; 'Laurel' o 'Yanny'. Es el nuevo fenómeno de internet. Unos oyen 'Lorel', 'Laurel' en inglés, y otros escuchan Yanni. Para saber qué respuesta es la correcta se ha llegado a acudir a la Casa Blanca. Y allí, por muchos códigos nucleares que tengan y que manejen la economía y dirijan el mundo, no son capaces de ponerse de acuerdo en esto. Sobre todo, con un presidente cuya mejor aportación al tema es su ya sabido 'covfefe'.
Ya solo nos queda confiar en los robots. Según los cálculos de una inteligencia artificial, la respuesta correcta es Laurel, pero nosotros vamos a escuchar una palabra u otra dependiendo de la capacidad de nuestro oído para captar frecuencias. Si captamos bien las altas, escucharemos Yanny. Si no, Laurel. Y si no escuchamos ninguna de las dos es posible que nos hayamos dejado llevar ya por los memes.
Porque lo de escuchar algo y que el resto no, ha ocurrido siempre. En el Palacio de Linares de Madrid, Raimunda nos lleva llamando media vida y muchos solo escuchan ruido. Son las psicofonías. Ruidos captados por una grabadora que para algunos lo son todo y para otros la nada. Así es la vida. Todo depende del oído con el que se escuche.
Entrevista a Irene Vallejo
Cinco años de 'El infinito en un junco', el éxito inesperado de las letras españolas que nació en un hospital
"Vivía a través de los libros lo que no podía permitirme en la vida real", nos cuenta Irene Vallejo. Su gran obra, de la que se han vendido más de un millón y medio de ejemplares, la escribió en un hospital mientras curaban a su hijo recién nacido.