Tenía solo 11 años
Liana y una vida de película con acento andaluz: historia de la espía más joven de la Segunda Guerra Mundial
Con tan solo 11 años, guardaba microfilms en su ropa para traspasar los controles enemigos en Gibraltar. Liana tiene ahora 92 años y ha contado a laSexta cómo se convirtió en la espía más joven de la Segunda guerra Mundial.
Durante la Segunda Guerra Mundial, la bahía de Algeciras era un nido de espías. Lo llamaban la 'Spy Row'. "No había habido antes una joven, tan joven, dedicada a este asunto porque yo tenía entonces 11 años", nos cuenta Liana para dar inicio a su historia. Ella actuaba a la sombra de su madre, Larissa Swrisky, espía de los alemanes... como tapadera.
"La misión de mi madre era pasar la información. Los italianos habían volado unos tanques de combustible. Se dedicaban a ir conduciendo los Maiale, que eran una especie de torpedo humano", recuerda Liana en declaraciones a este medio. La misión de Swrisky era entrar a Gribaltar y, usando una Minox, hacer fotografías en busca de rastros de los ataques enemigos. Y salir de allí sin ser descubierta.
Liana no olvida aquella época: "Caminando por el muelle, (mi madre y yo) nos cruzamos con un caballero. Él le ofreció un cigarrillo, mi madre lo aceptó, pero el mechero no funcionaba. Mirándole atentamente a los ojos, le dijo: 'No me habéis dejado combustible ni para el mechero'". Él era un espía británico, tal y como nos confiesa la joven espía. "Mi madre me dice: 'Liana, me han descubierto. A ver cómo salgo de Gibraltar'".
Swrisky simplemente era una exiliada rusa más que trabajaba de espía por una promesa con la que le convencieron los alemanes y que Liana mantiene intacta en su memoria a día de hoy: "Si usted trabaja para los alemanes, nosotros le devolveremos su patrimonio y posesiones de Rusia". Su madre no sabía qué ocurría realmente en Europa. Hasta que un día, una visita de su hermana Ala, trabajadora de la resistencia francesa, le abrió los ojos.
"Mi tía le empezó a contar la realidad de la barbarie alemana. Que los campos no eran de concentración, sino de exterminio", relata Liana. Es una historia de espías, una de tantas que hubo en aquellos tiempos en la bahía de Algeciras. Pero, sin duda, una especial. Porque este es uno de los muchos secretos de Liana, que 'amenaza' con humor a laSexta: "Si te los cuento, te tendré que matar".