Las manos son indispensables para crear música, pero con estos guantes la composición adquiere una nueva dimensión. Las manos son el propio instrumento, y los sonidos brotan de ellas. El límite es la imaginación pero ¿cómo funciona? Sencillo.
Los guantes contienen sensores que miden cuánto se doblan los dedos y la orientación de los puños. La información de los guantes se transmiten vía wifi a un ordenador que es el que se encarga de interpretar los movimientos y darles sentido.
Percusión, guitarra, sintetizadores, voz. Todo está al alcance de unos pocos gestos. Pero no es tan fácil como mover un dedo. Crear música a partir de estos guantes requiere mucha práctica.
Hay artistas como Ariana Grande que ya se han animado a usarlos en algún concierto. Los guantes obligan a cambiar el chip, porque se necesitan unos gestos concretos, una coreografía. Una relación física con la música.
Lo cuenta Mikel Guerendiain en 'Mauro'
La fuga carcelaria que humilló al franquismo y desató una brutal represión: 800 presos escaparon, pero solo tres lograron la libertad
El historiador Mikel Guerendiain recupera en Mauro la historia de la fuga del Fuerte de San Cristóbal, que ocurrió en 1938, en la que cerca de 800 presos escaparon de una de las peores cárceles del franquismo.