La actriz británica Maggie Smith ha muerto este viernes a los 89 años, según ha informado la cadena de televisión BBC. La actriz es ganadora de dos premios Oscar y ha tenido importantes papeles en las películas deHarry Potter y la serie Downton Abbey.
La intérprete "falleció pacíficamente" en el hospital la mañana de este viernes, han confirmado sus hijos Chris Larkin y Toby Stephens en un comunicado. "Era una persona muy reservada, y al final estuvo con amigos y familiares. Deja dos hijos y cinco nietos cariñosos que están devastados por la pérdida de su extraordinaria madre y abuela", han expresado en el comunicado.
Smith fue una de las pocas actrices que ganaron el triplete: dos Oscar, cuatro Emmys y un Tony. Su larga carrera empezó en el teatro en la década de 1950, pero para muchos de sus seguidores más jóvenes era más conocida como la profesora McGonagall en las siete películas de Harry Potter y la condesa viuda en la exitosa serie de televisión y películas derivadas de Downton Abbey.
En esta serie tuvo un papel que parecía hecho a medida para una actriz conocida por sus comentarios mordaces y bromas maliciosas. Su primera nominación al Oscar fue por su papel de Desdémona junto a Laurence Olivier en Otelo en 1965, antes de ganar el Oscar por su papel de maestra de escuela de Edimburgo en Los mejores años de la señorita Jean Brodie en 1969. Ganó su segundo Oscar por su papel de reparto en la comedia de 1978 California Suite, una actuación que llevó a su coprotagonista Michael Caine a decir: "Maggie no solo robó la película, sino que cometió un gran hurto".
Otros papeles aclamados por la crítica incluyen Lady Bracknell en La importancia de llamarse Ernesto de Wilde en el escenario del West End, una mujer de 92 años que lucha amargamente contra la senilidad en la obra de Edward Albee Tres mujeres altas y su papel en la película de comedia negra de 2001 Gosford Park.
