Nacho Cano asegura ahora que cuando afirmó que "el criminal es la Policía" no se refería a todo el cuerpo policial, sino a los responsables de su detención el pasado martes, cuando fue arrestado por presuntamente contratar a inmigrantes en situación irregular para su musical. El artista y productor, no obstante, insiste en su discurso conspiranoico y habla de "montaje".
El que fuera miembro de Mecano ha querido matizar las declaraciones que ofreció en rueda de prensa tras ser puesto en libertad, cuando sostuvo que van a por él por su apoyo a Isabel Díaz Ayuso e incluso llegó a afirmar: "Si me encuentran muerto en la cuneta, ya sabéis quién ha sido". Unas palabras que han llevado al Sindicato Unificado de Policía a amenazarle con una querella.
Este jueves, sin embargo, Cano ha sostenido que no se refería "al Cuerpo de la Policía Nacional, ni mucho menos a toda la Policía, sino a los responsables de este caso", pero ha insistido en que "lo exagerado y desproporcionado de la actuación y la filtración a medios del Gobierno apuntan a otros motivos" tras su arresto.
"Los delincuentes sí pienso que son los que abusan de su uniforme para montar campañas por cuenta del Gobierno", sostiene el artista, que señala a "unos pocos que acaban pasándose de frenada porque se creen impunes" y les acusa de intimidar a sus becariospara sacarles información que le perjudicara.
Este, asegura, es "el objetivo de todo el montaje" para "fabricar una noticia" que "distrajera a la opinión pública" del caso de Begoña Gómez y la investigación al hermano de Pedro Sánchez.
Según Cano, ha recibido "el respaldo de muchos miembros de esos cuerpos de seguridad" e "incluso un sindicato de la Policía ha denunciado los hechos y a las manzanas podridas que ejecutaron el montaje". "De todos modos, quiero aclarar que no era mi intención dar la impresión de que mis palabras se referían a todo el Cuerpo y pido disculpas si así se entendió", agrega.
"Siempre he sido un defensor de los Cuerpos de Seguridad del Estado", ha insistido Cano, que reitera que "este modo de operar desproporcionado no es normal" y asegura que "no se respetaron las garantías habituales". Así, concluye pidiendo que "se abran las investigaciones pertinentes para dirimir responsabilidades" por lo que considera "una actuación que mancha el buen nombre de nuestra Policía".