El cuerpo de Salvador Dalí se encuentra momificado y "muy bien conservado", y su bigote preserva aún "su clásica postura de las diez y diez", según ha explicado en Figueres el secretario de la Fundación Gala-Dalí, Luis Peñuelas.
En la exhumación del cuerpo de Dalí fueron extraídas muestras de cabello, uñas, piezas dentales y dos huesos largos para analizar el ADN, que la Fundación ha solicitado que, tras las pruebas, regresen a Figueres para ser devueltas a la tumba.
"La exhumación se ha realizado sin incidente alguno remarcable", ha explicado Peñuelas, que ha llegado a calificar la intervención como "casi un acto de violencia" contra el artista fallecido.
Para preservar la intimidad durante la extracción de muestras, se instalaron dos carpas sobre la tumba y el lugar en que trabajaban los forenses y se requisaron los móviles de todos los presentes en el interior del Teatro-Museo. "Lo importante es que Salvador Dalí vuelve a descansar bajo la cúpula".