La voz de Sidney O'connor se convirtió en un icono gracias a 'Nothing Compares to you'. Pero Prince también la cantó, porque en realidad la había compuesto él. Músico incansable, Prince también hizo canciones para otros artistas y siempre las dejaba grabadas con su voz.
Unas maquetas que ahora ven la luz en un disco llamado 'Originals', y que son precisamente eso, los "originales" que el de Minneapolis dejó en su cámara acorazada. Una guía vocal para los músicos que después las iban a grabar. Cortes en los que él, muchas veces, es la voz, la batería o la guitarra.
Tesoros grabados durante diez años, del 81 al 91, y que acaba de descubrir el archivero encargado de su legado. Y dice que son tan buenos que a veces, en una sola toma, Prince supera lo que harían después otros artistas grabando durante horas.
Canciones que llegaron al número uno en la voz de otros, como el 'Manic Mondays' de The Bangles, o que relanzó carreras. Siempre compuestas por un artista con mayúsculas que, tres años después de su muerte, nos sigue sorprendiendo. Porque como él mismo decía: Prince es música.
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