Los Juegos Olímpicos acaban de empezar, pero ya se está observando un aumento de las ciberestafas dirigidas a los amantes del deporte.

Hay estafas de todo tipo, aunque destaca la venta de entradas falsas, algo habitual en grandes eventos. Se han identificado más de 700 páginas aparentemente oficiales, pero en las que se ofrecen entradas exclusivas de un evento con el aforo lleno desde hace mucho tiempo.

Incluso existen estafas de sorteo internos para empleados o clientes de algunas empresas, prometiendo la oportunidad de ganar entradas para los Juegos.

"Mucha atención al tipo de información que recibimos. No hay que hacer cesión de datos en aquellos formularios que no conocéis el origen", advierte al respecto Marc Rivero, Lead Security Researcher de Kaspersky.

También el merchandaising es excusa para la estafa. Se ofrecen productos 'oficiales' a gangas, como ya se han encontrado en varias páginas de venta fraudulentas, con productos, no solo falsos, sino que nunca llegan.