Victor Wembanyama se está llevando todos los focos en sus primeras semanas como jugador de la NBA y más reciente número 1 del Draft. La expectación con el francés es una de las más grandes vividas con un rookie desde que LeBron James llegó a la liga en 2003, pero no muy lejos anduvo Zion Williamsonen 2019.
El ahora jugador de los New Orleans Pelicans era un jugador conocido por todo el mundo gracias a sus vídeos virales de mates en partidos desde que estaba en el instituto. Las ganas por verle en la NBA eran máximas y la franquicia de Luisiana no dudó en seleccionarle como número 1 del Draft en 2019.
Desde entonces, la carrera de Williamson no ha sido la esperada. Cuando ha podido jugar, ha brillado, pero la realidad es que en sus cuatro primeros años en la liga solo ha jugado 114 partidos de los 328 en los que podía haber participado debido a las continuas lesiones.
El ala pívot de dos metros y 128 kilos ha recibido múltiples acusaciones sobre sus problemas con el sobrepeso y su dificultad para ponerse en forma. Un tema que ha tratado abiertamente en el podcast 'Gil's Arena' con el exjugador Gilbert Arenas.
"Es difícil hombre. Tengo 22 años y tengo todo el dinero del mundo, bueno, se siente como todo el dinero del mundo. Es difícil", contestó Williamson al ser preguntado sobre su capacidad para comer sano.
Pese a esa justificación, Zion reconoce su culpa en gran parte de los partidos que se ha lesionado: "Como me enseño Mike Krzyzewski (su exentrenador en la universidad), tengo que asumir mis responsabilidades. Hay muchas cosas que podría haber hecho mejor. No lo hice. Estoy en el proceso de corregir esos errores".
Estos problemas con las lesiones y el peso no impidieron a su equipo, los Pelicans, firmarle un contrato de 231 millones para los próximos cinco años. Y es que el potencial de ser un gran jugador de la liga está ahí. Eso sí, con una cláusula de penalización por si en algún momento superase los 133 kilos de peso.
Un potencial que el propio Zion asegura seguir teniendo: "Cuando estoy en el banquillo de baja, viendo a mis compañeros, en algunos partidos que están perdiendo sé que si estuviera en pista podría cambiar el resultado".
"Lo que quiero que la gente sepa sobre mí es que quiero jugar, quiero estar ahí. No quiero estar al margen. ¿Creen que quiero sentarme allí lesionado? No", concluyó.