Sí, es posible ir igual o más rápido que un coche subido en una bicicleta. Así lo ha demostrado Neil Campbell, que ha marcado un nuevo récord del mundo al ir a una velocidad de 280 kilómetros por hora sobre dos ruedas y sin motor.
Para lograrlo, eso sí, tuvo que recibir el empujoncito de un coche. Campell fue arrastrado por un vehículo para alcanzar este registro.
Gracias a él ha establecido un nuevo récord, tras batir la anterior mejor marca que era de 268 kilómetros por hora.