En los Juegos Olímpicos no es oro todo lo que reluce. Fran Garrigós empezó a practicar judo a los cuatro años. 25 después, se ha colgado el bronce en París. "Hasta que consigues los resultados cuesta mucho y es la familia quien tiene que ayudarte a pagar todos esos viajes, esos entrenamientos", ha expresado.
El Comité Olímpico Español le dará 30.000 euros. 48.000 a quienes consigan la plata y 94.000 a los que se alcen con el oro, por encima de lo que paga el país anfitrión. Damián Quintero, medallista olímpico, ha asegurado que "no te haces millonario", pero que no "está mal" si lo comparas con el salario medio en España.
Damián Quintero lleva 22 años en la alta competición. Y no fue nada fácil colgarse la plata en Tokio. "Entre el 2012 y 2015 era un cadáver andante porque trabajaba, estudiaba y competía a la vez". Muy comentado ha sido este año, el caso de Jack Laugher, el saltador británico. Cobra unos 30.000 euros anuales y está buscando ingresos extra en OnlyFans, subiendo, bajo suscripción, fotos semidesnudo.
Y es que, al fin y al cabo, una medalla olímpica acaba siendo más un símbolo o un sentimiento, que una recompensa económica al esfuerzo. "Se gana mucho más por patrocinios que lo que es la medalla. Creo que al final la medalla es más como un sentimiento". ha afirmado Daniel Arce, atleta olímpico.
No hablamos, por supuesto, de países como Singapur o Taiwán, que pagan 650.000 euros por el oro. Nada que ver con España. E incomparable también con Suecia, Noruega y Nueva Zelanda, que directamente no conceden premios económicos.