En medio de la vorágine de polémica arbitral que se inició tras el partido de Anoeta ante la Real Sociedad, que se saldó con un empate a dos, el FC Barcelona llegará al Clásico con luces y sombras. Tras 16 encuentros ligueros disputados, los de Valverde han sumado tres derrotas, todas ellas lejos de casa y con un denominador común, la suplencia de Sergio Busquets.
Pese a las voces críticas que sobrevuelan la cabeza del de Badia, el mediocentro se antoja, un año más, como pieza trascendental en uno de los grandes partidos de la temporada. Tras una actuación en Donosti en la que estuvo lejos de su mejor momento, todo apunta a que el pivote culé formará medio campo junto a Frenkie de Jong e Ivan Rakitic, quien ha vuelto al once inicial con cinco titularidades en los últimos cinco encuentros. Entre ellos, destaca la presencia del croata en el Wanda Metropolitano, cuando el Barça se impuso por 0-1 al Atlético de Madrid.
Al margen de Rakitic, la otra gran baza en la medular culé es la carta de Frenkie de Jong, quien se incorporó a la disciplina culé en verano, tras haber sido comprado al Ajax de Ámsterdam durante la pasada temporada. El holandés ha deslumbrado con la capacidad para combinar su inteligencia táctica con su poderío físico.
En la delantera, Leo Messi, tras perderse las cinco primeras jornadas de la competición, ya se encuentra como máximo anotador del campeonato, con doce goles en once partidos disputados. Además, tras los tantos de Suárez y Griezmann en el partido ante la Real Sociedad, el trío atacante suma 27 goles en la competición doméstica. La MSG llega en plena forma para medirse al Real Madrid.
Por último, la zaga culé sigue presentando dudas. En la vuelta a los terrenos de juego de Jordi Alba en el empate ante los 'txuri urdin', se vio al lateral falto de forma e impreciso en más de una toma de decisiones, tras su ausencia prolongada desde la cuarta jornada de la fase de grupos de la presente Champions League. Fueron un total de seis encuentros los que el veloz jugador culé se perdió por su lesión en el biceps femoral.
Por otra parte, la pareja de centrales formada por Gerard Piqué y Clément Lenglet parece haberse asentado, una temporada más, con tres titularidades conjuntas seguidas en Liga. La última gran certeza de Ernesto Valverde es la de su portero. Marc-André ter Stegen sigue fiel a su tradición de grandes intervenciones, pese a que en el partido contra la Real Sociedad concediera un remate 'fácil' a Isak en el gol del empate.