El último en marcharse el Atlético de Madrid ha sido Thomas, aunque no de la mejor forma. El club colchonero esperaba ser informado por el jugador y por el Arsenal, sin embargo, fue LaLiga quienes les avisaron del pago de la cláusula de rescisión.
Y así es como Thomas se convierte en el cuarto rojiblanco que tiene que pagar para poder irse del equipo. El Arsenal había intentado negociar el importe de la cláusula, que estaba fijada en 50 millones de euros. Querían rebajarla, incluso se rumoreó con que les cedían a Lacazette y Guendouzi, sin embargo, ante la negativa del Atlético, decidieron pagar íntegramente la cifra.
Fue Rodrigo el primero que tuvo que hacer frente a su cláusula. En 2019 fichó por el Manchester City pagando los 70 millones que le liberaban del club.
Lucas Hernández es otro jugador que para poder irse al Bayern tuvo que pagar 80 millones de euros.
Finalmente, Griezmann se marchó al FC Barcelona sin acuerdo y teniendo que hacer el pago de los 120 millones que indicaba su cláusula de rescisión, aunque los azulgranas tuvieron que volver a pagar una nueva cantidad, esta vez de 15 millones, ante la polémica de cuánto tendrían que haber pagado por el francés.