Máxima tensión la que se vivió en Stamford Bridge. Cuando se jugaba el minuto 73, César Azpilicueta se llevó una patada salvaje de Sekou Mara, del Southampton, y quedó tendido en el terreno de juego por una acción más propia del taekwondo que del fútbol.
El atacante del equipo visitante, en un intento de chilena, impactó con su pie derecho en toda la cara del defensor del Chelsea, que se quedó completamente K.O. en el césped.
Fueron diez minutos los que Azpilicueta estuvo tendido en el verde, con las asistencias poniéndole un collarín y prestando la debida atención.
Posteriormente, el futbolista del equipo de Londres fue evacuado en camilla y con oxígeno, mientras recibía la ovación de todo el estadio del Chelsea.
Quizá por entender el árbitro que fue completamente fortuito, el atacante del Southampton tan solo vio la amarilla.
El Chelsea, en un partido marcado por esta peligrosísima acción, perdió 0-1 ante el Southampton y sigue inmerso en una crisis que no arreglan ni los muchos millones gastados en invierno.
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Insultos racistas sin culpable
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¿Qué pasó? Los hechos fueron gravísimos, lo reconoce el propio juez, pero solo lo corroboran los testimonios de la familia de la víctima. El aficionado acusado lo niega. La familia asegura haberse enterado por los medios de comunicación.