Fue el propio Christian Eriksen quien pidió a sus compañeros que salieran a jugar. El futbolista se encontraba consciente en el vestuario, donde también tranquilizó a su mujer. A través de videollamada, pidió a la selección danesa que reanudara su partido ante Finlandia. Y sus compañeros le hicieron caso. La UEFA informaba de la reanudación en un comunicado.
Mientras las noticias positivas sobre el centrocampista llegaban, las aficionados dejaron una imagen emocionante en el campo. Finlandeses y daneses coreaban juntos el nombre de Christian Eriksen. Gritaban el nombre los daneses, contestaban el apellido los daneses.
Minutos después, ante el anuncio de la UEFA, el público estalló en alegría. El partido se volvería a jugar y lo más importante, Eriksen evolucionaba favorablemente. Viajaba en ese momento hacia el hospital acompañado por su pareja en la ambulancia.
Al volver al terreno de juego, los futbolistas de Finlandia aplaudieron a sus rivales, que se dirigían a su banquillo. Algunas sonrisas se podían ver en la plantilla, que vivieron un momento terrorífico con su compañero en el suelo durante más de 15 minutos.
Eriksen abandonó el campo consciente, en una imagen que tranquilizó al mundo del fútbol. Las noticias positivas continuaron y fue entonces cuando se tomó la decisión de retomar el encuentro.
Una tarde más que angustiosa en Copenhague, donde el fútbol pasó a un segundo plano y la mejor noticia fue el estado de salud de Eriksen, al que le seguirán realizando pruebas durante la noche de este sábado.