La polémica que rodea el 'caso Negreira' no deja de crecer día tras día. Las últimas investigaciones, publicadas por 'El Mundo', apuntan a que los pagos, que ascienden a 7,3 millones de euros durante 17 años, iban destinados a sobresueldos de los altos cargos del FC Barcelona.
Es la Guardia Civil la que sospecha acerca del destino del dinero recibido por el exvicepresidente del CTA (Comité Técnico de Árbitros), José María Enríquez Negreira, y su hijo, Javier Enríquez. En este supuesto, el dinero podría tratarse de sobresueldos que volverían al club culé.
Las conclusiones que la Guardia Civil ha transmitido al Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona sostienen que la mayoría de los abonos eran retirados en efectivo de sus cuentas corrientes. En ocasiones, a través de intermediarios.
Actualmente, la Justicia está indagando las cuentas del club catalán desde 2001 hasta la actualidad. Eso sí, todavía no se descarta la posibilidad de que estas cantidades fueran destinadas a la compra de árbitros.
Presuntas apuestas ilegales
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Los detalles Se investiga lo ocurrido al final de la temporada pasada. Con el Sevilla matemáticamente salvado, Salas vio hasta siete amarillas en las últimas nueve jornadas. Una cada 87 minutos y, casi siempre, en los minutos finales del partido.