El italiano Giuseppe Rossi lideró con tres goles la cómoda victoria del Celta de Vigo ante Las Palmas en un partido que dominó el conjunto local, muy superior en la primera media hora, y que lo mantiene vivo en su lucha por una plaza europea para la próxima temporada.
La apuesta fue exitosa. Sobre todo para Rossi, que recuperó su olvidada imagen de delantero letal, rápido en los espacios, preciso en el remate. Con Jozabed y Rossi, escoltados por Aspas y Sisto desde las bandas, el ataque del Celta fue voraz.
El Celta impuso su autoridad
Su primera media hora fue la soñada por Eduardo Berizzo: posesión de la pelota, presión asfixiante en campo rival y ritmo alto de juego. Solo le faltó al Celta más pegada, como en muchos otros partidos.
Tuvo ocasiones. Primero llegó un aviso de Jozabed con un lanzamiento al travesaño (minuto 9). Después, el gol de Rossi, que aprovechó, como delantero oportunista, un error defensivo enorme de Bigas (minuto 12) Las Palmas fue un juguete en manos del Celta, más agresivo en la presión, más rápido en el toque de pelota.
El gol de Rossi disparó el acoso gallego sobre la portería canaria: un tiro de falta de Wass (minuto 15), otro de Aspas que se envenenó para Lizoain al golpear en la barrera (minuto 19), un cabezazo de Rossi a la salida de un córner (minuto 20) o un mano a mano de Aspas ante el portero tras un pase largo de Wass (minuto 25).
Todas esas ocasiones no tuvieron el botín del gol. Sin la pelota, al ritmo que marcaba el rival, el conjunto de Quique Setien estaba herido, aunque pasada la media hora se liberó de la presión gallega.
Las Palmas avisó tímidamente
Mejoró cuando tuvo la pelota, o cuando adelantó sus líneas. De hecho, rozó el empate cuando Boateng se plantó ante Sergio al aprovechar un mal pase de Jonny a Fontás (minuto 30).
Y hasta marcó, en un gran remate de David Simón que anuló el árbitro por fuera de juego, pese a ser correcta la posición del jugador de Las Palmas. A ese error arbitral contestó el Celta con un contragolpe guiado por Aspas y culminado por Rossi, tras el rechace de Raúl Lizoain (minuto 35).
No tuvo el equipo visitante la espectacular pegada que exhibió Rossi. El primer tiempo se cerró con un lanzamiento al travesaño de Vicente, tras una gran triangulación con Tana y Boateng (minuto 41); la segunda mitad abrió con otro contraataque celeste y otro gol de Rossi, el tercero (minuto 56).
Con tres goles de ventaja, el Celta bajó su intensidad. Tampoco Las Palmas se lanzó a por la remontada. Mejoró el equipo de Setien, pero dentro del escenario de un partido abierto, de ida y vuelta, en donde a un centro peligroso de Jesé (minuto 59), al momento respondía el Celta con una clara ocasión que malgastaba Pione Sisto.
La mejor versión canaria llegó en la última media hora, cuando empezó a bombardear la portería de Sergio, inseguro por alto en algún centro: un lanzamiento de Bigas desde fuera del área (minuto 78), un gol de Pedro Bigas al rematar una pelota colgada en el área (minuto 80), una mala definición de Jonathan Viera ante Sergio (minuto 85) o un tiro de Jesé (minuto 88); oportunidades insuficientes para iniciar una posible remontada.