José María Enríquez Negreira, quien fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros que cobró durante 17 años del FC Barcelona, reconoció en su declaración ante la Agencia Tributaria que el Barça "quería asegurarse que no se tomaban decisiones en su contra".
"Mi obligación era dar mi opinión sobre los partidos en cuanto al arbitraje y a los jugadores. Asesoramiento técnico. Lo que el Fútbol Club Barcelona quería era asegurarse que no se tomaban decisiones en su contra, que todo fuera neutral", dice sobre el trabajo que hacía para el club azulgrana en su declaración.
Asegura Negreira que con ese dinero nunca pagó a árbitros o exárbitros y que el Barça le pagaba porque así "estaban tranquilos de que en el comité arbitral no había decisiones en contra del Fútbol Club Barcelona, que todo era neutral".
Reconoce que sus contactos en el Barça eran los expresidentes Sandro Rosell y Josep María Bartomeu y que no cobraba del CTA porque "ya tenía su empresa de la que cobraba del Barça".
Fueron 17 los años en los que Negreira cobró del cuadro azulgrana. Desde el presidente Joan Gaspart a Bartomeu, quien cesó los pagos: "El Barcelona lo decidió unilateralmente. De hecho, le envié una carta a Bartomeu y me quejé de incumplimiento de contrato, después le llamé, pero no me cogió el teléfono".
Su salida del CTA, ¿a causa de una "conducta punible?
'Football Leaks' desveló la pasada semana que fue Laporta el que retomó los pagos al vicepresidente de los árbitros en 2005, multiplicando por cuatro en los siguientes años.
En su informe, la Agencia Tributaria recoge que Javier Enríquez Negreira, durante su "colaboración" con el club azulgrana, "intentó en varias ocasiones ser contratado" directamente por el FC Barcelona "sin éxito".
En su declaración, Enríquez Negreira también reconoce que no era él quien elaboraba artículos para 'Mundo Deportivo', si no que era su hijo quien lo redactaba aunque luego fuese su firma en ellos para que tuviesen "más gancho".
En sus conclusiones, la Agencia Tributaria asegura que "no consta prueba alguna" de que Enríquez Negreira pagase a árbitros ni que pudiese influir en resultados. Lo que sí se llegó a plantear es si la salida de Enríquez Negreira del Comité Técnico de Árbitros se debió a "alguna conducta punible".