La decisión de Leo Messi de dejar el FC Barcelona ha cambiado muchos planes. Por ejemplo los de Antoine Griezmann, que tras una sola temporada vestido de azulgrana tenía decidido cambiar de aires.
Así lo ha afirmado su exagente Eric Olhats en una entrevista en 'RMC': "Antes de este cataclismo contra el Bayern, Antoine solo tenía un deseo: marcharse".
La conversación con Ronald Koeman cambió su idea. El técnico holandés le transmitió confianza y le pidió que diera un paso al frente ante la marcha de los dos referentes del ataque, Messi y Luis Suárez.
"La conversación con Koeman lo tranquilizó. Lo incluyó como parte de sus planes y le dijo que lo consideraba un jugador importante para el futuro", comenta Olhats.
La realidad es que Griezmann ha pasado desapercibido en el Camp Nou después de ser el fichaje estrella del pasado verano (120 millones de euros). "Los balones que nunca llegaban, el comportamiento del entrenador por decir lo menos cuestionable... Es un chico que ha mantenido mucha frescura y solo trabaja con ganas. Era imposible pasar un año así", justifica su exagente.
A apenas 72 horas de volver a los entrenamientos, el galo, que recuperará el dorsal 7, se postula como el líder de este nuevo proyecto del Barcelona.