Radamel Falcao ya sabe lo que es golear en LaLiga... con el Rayo Vallecano. El colombiano, gran estrella y atracción del cuadro rayista, anotó en el día de su debut el que fue tercer gol de los vallecanos en su victoria por 3-0 contra el Getafe.
No fue de la partida el cafetero, que aguardó en el banquillo a que llegase su momento en el duelo. La afición tenía ganas de verle en acción, y es que en el recuerdo del Rayo Vallecano sigue la figura de un Hugo Sánchez al que muchos ven de nuevo en Falcao.
Salió en el minuto 71 al encuentro, con 1-0 en el tanteador gracias a un penalti, discutible penalti, transformado por Trejo. Con él en el campo llegó el segundo, obra de Pathe Ciss a la salida de un córner que él provocó. Y a los diez minutos desde su ingreso le tocó a él.
Fue un tiro raso y potente desde dentro del área grande tras recibir un pase de Pathe Ciss. De los que él acostumbra. De goleador. De 'killer'. De '9'.
De un jugador que bien puede garantizar un buen puñado de goles a un equipo que sin duda alguna los va a necesitar sabiendo cuál es su pelea, al menos a priori. Porque Falcao no se quedó ahí y buscó más. Buscó otro. Otro tanto que no llegó.
Al final del partido no podía estar más feliz: "Soñaba con poder saltar y marcar. Le dedico todo esto a mi familia. Mis compañeros me han dado mucho ánimo".