La polémica originada por la foto de un aficionado tocando un pecho a la jugadora Sofía Huerta no cesa. Ahora es el propio aficionado, llamado David, el que ha salido a dar explicaciones públicamente sobre lo ocurrido.
Asegura que es "padre de familia" y que no le gustaría que le hiciesen eso a su hija, defendiendo que "fue sin querer". "No le toqué en ningún momento. Por la inercia de donde me agaché no vi dónde coloqué la mano, la mirada la tenía fija en mi móvil", relata en Tele Diario de Monterrey.
"En ese instante no fue mi intención acosarla, fue la fotografía y el ángulo de la fotografía, se malinterpretaron las cosas", comenta. Además, David cuenta que después de ese momento Sofía Huerta se hizo fotos con su hija y que no le reprobó su comportamiento.
Afirma que a su hija le están atacando a través de Instagram, ataques que también le llegan a través del Facebook de familiares: "Tengo miedo por mi integridad física y la de mi familia".
El Tigres ha confirmado que este aficionado será "vetado de por vida" del club por estos hechos a través de un comunicado.