El fútbol en tercera división es diferente. Y si hablamos de la tercera división inglesa, lo es aún más. En el encuentro de League One que enfrentaba al Port Vale y Portsmouth ayer sábado dejó una de las imágenes más impactantes de la jornada.

El incidente tuvo lugar después de que el colegiado del encuentro, Craig Hicks, señalara un penalti favorable al Portsmouth que dio lugar al definitivo 0-1 en el minuto 88. Tras ello, un aficionado local saltó al terreno de juego con el objetivo de agredir al árbitro.

El trencilla vio las intenciones del aficionado y comenzó a correr por el terreno de juego para, finalmente, resguardarse en la zona de banquillos, donde el cuerpo técnico de ambos equipos consiguieron acabar con la persecución del 'fan'.

Ante estos acontecimientos, la English Football League (EFL) y la Professional Game Match Officials Limited (PGMOL) han mostrado su más absoluto rechazo, admitiendo estar "horrorizados" después de este intento de agresión.

"Estamos consternados por el incidente... y condenamos las acciones sin sentido del individuo involucrado. Los árbitros nunca deberían sentirse amenazados por su seguridad cuando desempeñan un papel fundamental en la organización de los partidos de nuestras competiciones. Brindaremos todo nuestro apoyo a Craig y su equipo", declararon conjuntamente.

Por su parte, el Port Vale también ha querido condenar este incidente: "Trabajaremos con las autoridades pertinentes para garantizar que el asunto y el individuo sean tratados con un enfoque de tolerancia cero. Recordamos a todos los aficionados que entrar al terreno de juego es un delito penal".