Tras confirmarse que la muerte de Maxim Dadashev se debió a una lesión celebral devenida del combate que le enfrentaba al púgil portorriqueño, Subriel Matías, diversos expertos han hablado sobre los indicativos que deben de tenerse en cuenta para frenar un combate en un momento dado.
A pesar de que el boxeador difícilmente reconozca que no puede seguir peleando, la caída de los brazos, la debilidad en las piernas o la lentitud en los movimientos, son claros indicativos de que el púgil no se encuentra en un estado óptimo para proseguir el combate.