Luke Matheson tardará en olvidar esta semana. El jugador del Rochdale ha jugado contra el Manchester United el miércoles, ha tenido un examen de psicología el jueves, el viernes volverá a entrenar antes del partido contra el Wycombe Wanderers el sábado.
La clave ha sido ese partido contra el Manchester United en Old Trafford, un sueño hecho realidad en el que llegó a marcar un gol de volea con el que su equipo empató el partido 1-1.
Desafortunadamente, la tanda de penaltis decantó la victoria para el Manchester United, pero Matheson se llevó un recuerdo que jamás olvidará.
Sin embargo, poco ha podido saborear la victoria, ya que a la mañana siguiente tuvo que realizar un examen de psicología. A sus 16 años, Matheson compagina sus estudios con el fútbol, teniendo que cambiar el chip constantemente.
"Habría estado en la escuela en el día del partido, pero me dieron el día libre", asegura Matheson. Afirma que acudirá a la escuela para hacer un examen de psicología: "No puedo esperar para ello".
"La educación es algo que me encanta. Me encanta aprender, es lo que quiero hacer", revela. El jugador, nacido en octubre de 2002, debutó con el primer equipo del Rochdale a los 15 años y 336 días.
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Insultos racistas sin culpable
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¿Qué pasó? Los hechos fueron gravísimos, lo reconoce el propio juez, pero solo lo corroboran los testimonios de la familia de la víctima. El aficionado acusado lo niega. La familia asegura haberse enterado por los medios de comunicación.