Mesut Özil no está pasando por su mejor momento. El jugador alemán, que no ha tenido minutos tras el parón por coronavirus a pesar de ser el mejor pagado del Arsenal, ha sacado el látigo a pasear y no se ha librado prácticamente nadie.
Es especialmente crítico con la gente, a quien acusa de tratar de destruirle: "La gente lleva dos años queriendo destruirme. No fui el único que rechazó bajarme lo de la reducción salarial, pero solo apareció mi nombre. Supongo que porque soy yo".
"Es irrelevante lo que diga gente de fuera sobre mi juego o sobre mi carácter. Hay quien te amará o quien te odiará, lo principal es qué piensan aquellos que te conocen", cuentan.
El siguiente que se lleva su porción es Mikel Arteta, su entrenador en el Arsenal: "Respecto sus decisiones, pero no se me ha dado la oportunidad de demostrar qué puedo hacer".
"Si hubiera jugado mal lo entendería, pero no es el caso. No juegas diez partidos si no estás en forma o si no te comportas bien", afirma Özil en' The Athletic'.
Sobre eso, el ex del Real Madrid dice que ha "estado en forma" para jugar.
Con contrato hasta 2021, la intención del alemán es seguir en el club 'gunner': "Estaré hasta el último día aquí. Este tipo de situaciones solo me harán más fuerte. Ya demostré que puedo volver al equipo, y seré yo quien decida cuándo me voy".