Los problemas con los ultras en los estadios de Francia continúan. Los hinchas del Saint-Étienne protagonizaron un nuevo escándalo después de invadir el terreno de juego y arrojar numerosas bengalas a los jugadores del equipo rival, el Auxerre, tras consumarse el descenso de su equipo a la Ligue 2.
El caos, el descontrol y la violencia se adueñaron del césped del Estadio Geoffroy-Guichard una vez finalizado el último encuentro del playoff de descenso. El conjunto local del Saint-Étienne perdió en la tanda de penaltis y la próxima temporada disputará la segunda división francesa.
Bengalas, petardos, bombas de humo y agresiones contra los jugadores del equipo rival pero también contra sus propios jugadores. Las bochornosas imágenes de los hinchas locales ya se ha hecho muy virales en redes sociales, con una gran cantidad de comentarios negativos y muchos usuarios denunciando la situación.
Saint Etienne are relegated to Ligue 2… This is carnage. pic.twitter.com/qIwpvJ6zOT
— Harry (@ArryLavsTheYids) May 29, 2022
Los integrantes de ambas plantillas y sus cuerpos técnicos tuvieron que huir aterrados hacia el túnel de vestuarios para evitar que los incidentes fueran a más. No obstante, el conflicto se extendió a las afueras del estadio, donde los ultras continuaron utilizando varias bombas de humo ante la actuación de la Policía.
Desde el Auxerre han emitido un comunicado oficial condenando los hechos ocurridos. "A pesar de un dispositivo excepcional y reforzado, de cerca de 500 agentes, muchos aficionados invadieron el césped con el pitido final del partido ante el AJ Auxerre", comienza el escrito del club que ha logrado el ascenso a la Ligue 1.
"Algunos fueron entonces culpables de varias agresiones y actos de violencia hacia los que estaban en el campo, los agentes de seguridad, la policía y el público de la grada Pierre-Faurand. ASSE condena enérgicamente estos hechos, da todo su apoyo a los afectados e iniciará las acciones legales necesarias", añaden.