El Juzgado número 4 de Marbella impuso una multa al internacional holandés del Sevilla Quincy Promes en un juicio rápido celebrado por delito leve contra la seguridad vial tras haber dado positivo en una prueba de alcoholemia la pasada semana cuando circulaba con su vehículo por Puerto Banús.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han informado a Efe de que "se ha llegado a una conformidad" con el jugador, al que se le ha impuesto una multa por el mencionado delito, cuya cuantía no ha trascendido.
Los hechos, según publicó la pasada semana Diario de Sevilla, ocurrieron sobre las diez de la noche del martes 18 de diciembre, cuando en un control la Policía Local de Marbella le practicó una prueba de alcoholemia en la que el holandés arrojó una tasa superior a 0,60 miligramos por litro en aire respirado, más del doble del máximo de 0,25 permitido por ley.
Al rebasar la tasa de 0,60, el positivo por alcoholemia se considera un delito, por lo que el extremo sevillista fue denunciado por la vía penal y, además, la Policía Local procedió a la inmovilización de su vehículo, según publicó el diario.
Esa jornada la plantilla del Sevilla tuvo descanso, al igual que el lunes, y al día siguiente Promes se entrenó con normalidad con el resto de sus compañeros para preparar el choque que tenía el domingo en el campo del Leganés, el último de este año. Fuentes próximas al club hispalense informaron de que el jugador, de 26 años y fichado al Spartak de Moscú el pasado verano, fue parado con su vehículo en un control policial y, debido a que no llevaba documentación, fue requerido para que la presentase este lunes, sin especificar más detalles.