El Valencia prolongó su excelente estado de forma y de un partido complicado ante el siempre correoso Leganés logró marcharse con los tres puntos gracias a un tanto del inspirado Rodrigo (0-1). Llegaban los visitantes a Butarque habiendo ganado seis de sus últimos siete partidos y con la intención de seguir sumando méritos para amarrar cuanto antes su presencia en la próxima edición de la Liga de Campeones.
Marcelino introdujo dos cambios con respecto al once habitual, el de Doménech por Neto bajo los palos y el de Vezo en lugar de Montoya. Por su parte el Leganés, bien encarrilado el objetivo de la salvación, quería darle continuidad al triunfo sobre el Sevilla antes del parón por selecciones. Para ello el técnico apostó por modificar el dibujo, mostrando una defensa con cinco hombres.
Le funcionó la idea a Garitano, que con su planteamiento pareció anular las virtudes del contrario. Tampoco concedió este demasiado al anfitrión y durante la primera media hora la inquietud, que no el peligro, aparecía con pases largos a espaldas de la defensa. Ahí se encontraron más cómodos los blanquiazules, que sumaban hombres en ataque con la proyección de los laterales Zaldua y Diego Rico.
Sin embargo la primera ocasión llegó a balón parado tras un córner que no tuvo rematador en la segunda jugada. Más claro fue el intento del brasileño Gabriel, quien se animó con un golpeo desde la frontal despejado de puños por Doménech. Poco más en una batalla muy táctica donde el talento individual era el único factor llamado a marcar la diferencia entre ambos.
Transcurridos unos minutos, fue el Valencia el que empezó a asomar por el área de Cuéllar. Un centro de Carlos Soler desde la derecha que tocó Bustinza a punto estuvo de rematarlo bajo el larguero Kondogbia. Esos acercamientos animaron al equipo, que además se hizo con la posesión mientras trataba de encontrar los espacios que no concedía el Leganés. Dadas las circunstancias, entró el choque en fase de tensa calma.
La rompió Rodrigo. Empeñado en convencer al seleccionador, Julen Lopetegui, de que tiene que estar en el equipo para el Mundial de Rusia, apareció cuando más falta hacía. Lo hizo trazando un golpeo seco a ras de césped que puso en ventaja a los suyos y le permitió aumentar su racha de cara a puerta.
El punta ha marcado en los últimos cinco encuentros donde ha tenido protagonismo, incluido el que disputó España contra Alemania. En esta ocasión, eso sí, tiene mucho que agradecerle a Parejo y Kondogbia ya que entre los dos se las apañaron para rebañarle un esférico a Rubén Pérez en la génesis de la acción El revés despertó a los blanquiazules.
Sin nada que perder salieron estos de la retaguardia en busca del empate. Se vio entonces la buena versión de un grupo ambicioso que ha hecho de la competitividad su mejor arma. Ayudó la entrada en el campo de El Zhar y Beauvue.
Los dos dieron más intensidad a la faceta ofensiva y en el caso de este último pudo ser decisivo cuando entregó una buena asistencia para Amrabat. Le pegó el marroquí a puerta con todo pero Gayá se interpuso.
No cesó el empuje hasta el final y acabó el Valencia atrincherado en torno a su portería, mostrándose sólido pero tratando de arañarle tiempo al cronómetro. Esa capacidad de sufrimiento fue suficiente para alzarse con una importante victoria, la sexta en seis enfrentamientos ante el Leganés.