Si hubiera que describir la temporada del Chelsea quizá recurriríamos a los calificativos más negativos que conocemos. Los 'blues' han terminado en una deprimente doceava posición en la Premier League quedándose fuera de competiciones europeas con una plantilla que presenta un valor superior al billón de euros.
El valor de la plantilla no es lo único que salta a la vista. El Chelsea cuenta con 33 jugadores inscritos en su primer equipo según la plataforma 'Transfermarkt", número que supera con creces la cuantía habitual en un vestuario profesional (alrededor de 23).
Para hacerse una idea de la amplitud del grupo, ahora mismo, se podrían configurar hasta tres onces distintos sin necesidad de repetir ningún jugador.
El cuadro británico ha vivido en un cambio constante esta temporada. Ya no es sólo la cantidad de jugadores fichados, es que el conjunto de Londres ha tenido 4 entrenadores este año (Thomas Tuchel, Graham Potter, Bruno Sadlor y Frank Lampard). Ninguno ha sabido dar con la tecla para hacer funcionar un equipo plagado de estrellas.
Sólo esta temporada el conjunto 'blue' ha gastado más de 600 millones de euros en fichajes entre los cuales se incluyen futbolistas de la talla de: Enzo Fernández, Raheem Sterling, Kalidou Koulibaly, entre otros muchos.
A estas incorporaciones se le suman los artífices de aquella Champions League cosechada hace ya dos años. Los Mason Mount, Kai Havertz, Recce James y compañía ha ofrecido una versión bastante alejada a la que mostraron aquella Copa de Europa de 2021.
La última llegada ha sido la de Nicholas Jackson por 35 millones procedente del Villarreal, a falta de confirmación oficial. No obstante, el Chelsea puede que se haya dado cuenta de su problema y ha activado la 'operación salida'.
Mount, Koulibaly, Havertz, Hakim Ziyech, Eouduard Mendy, Mateo Kovacic, entre otros, están intentado cerrar su traspaso a otros clubes. La razón es en gran parte, el nuevo proyecto que tiene en manos el club inglés, sobre el cual ya ha asignado un capitán al mando, Mauricio Pochettino.