"Mañana voy a Teherán, a la capital, la televisión va a filmar un reportaje sobre mí y de ahí nos vamos a Bandar Abbas con su familia. Una vez allí cerca del puerto para tomar un barco a qatar haré vídeo o lo que sea". Es la última conversación de Santiago Sánchez, el español desaparecido en la frontera con Irán, con su familia. Por primera vez, sus padres hablan con un medio.
Ya suman 23 días sin saber nada de Santiago y la angustia les invade. Según cuentan sus padres, les dijo que iba a un país (Irán) en el que no tendría comunicación porque está bloqueado. Pero la preocupación aumenta cada día que suman sin saber nada de él. "A los 8 o 9 días ya empezamos a pensar que teníamos que denunciar su desaparición", explican.
Santiago tiene experiencia, estuvo incluso dos años en el ejército y ha visitado más de 50 países. Este año en enero se propuso viajar desde Madrid a Catar andando, con la finalidad de llegar a la sede del Mundial cuando este arrancara. Hasta ahora iba subiendo publicaciones a Instagram sobre su camino, contando anécdotas del trayecto.
Los 'posts' que iba subiendo Santiago tenían que ver con las ubicaciones o las personas que iba conociendo por el camino, acompañado siempre de su tienda de campaña y sus numerosos objetos personales.
Su última publicación es de hace tres semanas, en la que explicaba que se encontraba en Irak y que solo le separaba una montaña para llegar a Irán, último país antes de llegar finalmente a Catar.
Precisamente, una pareja kurda con la que estuvo antes de cruzar la frontera ha dado detalles de esos últimos momentos con él. "Se dirigió a la carretera de Bashmkh y fue visto por nuestra gente y familiares cerca, a la puerta. Camino hasta la puerta fronteriza y se despidió, no sabemos qué pasó después", confiesan.
Según cuentan, Santiago había dormido el día anterior en su casa. "Le preparé el desayuno por la mañana y por la noche le cociné pollo y sopa". Exteriores asegura que ningún país del entorno ha comunicado que esté detenido.