La vuelta del público a los estadios ha traído de regreso a los ultras. A los que no se quieren ver ni en las gradas ni fuera de ellas tampoco. Y es que, de nuevo, los radicales han hecho de las suyas durante el partido entre el Niza y el Olympique de Marsella de la Ligue 1.
Sobre el minuto 74, los radicales del equipo de la costa azul, los radicales que estaban en las gradas del Allianz Riviera invadieron el campo con el objetivo de pegar a los futbolistas marselleses.
Todo comenzó cuando los ultras lanzaron una botella a Payet cuando se disponía a lanzar un córner. El jugador la devolvió, y en ese instante los radicales bajaron al campo a pegarle.
La seguridad, como si no estuviera. La invasión fue multitudinaria y el árbitro no tuvo más opción que suspender el partido.
Mientras los aficionados bajaban de las gradas con completa impunidad, los jugadores de ambos equipos también tuvieron sus más y sus menos.
Unas imágenes a desterrar del mundo del fútbol, y del mundo en general.
El encuentro, en ese momento, iba 1-0 favorable al Niza por un gol de Dolberg.