Rivaldinho se encontraba atravesando momentos muy difíciles tras la muerte de su madre. Sin embargo, el brasileño no se imaginaba la sorpresa que le esperaba: jugar con su ídolo, su padre.
Padre e hijo jugaron y marcaron juntos. Rivaldinho, que recuerda ese momento con mucha emoción, quiso dejarlo inmortalizado en su piel tatuándoselo. También lleva siempre presente a su madre en forma de una frase que mantiene vivo su recuerdo.
Rivaldo y su hijo siempre han estado muy unidos. De hecho, llegaron a hacer un anuncio juntos. "No es fácil ser jugador, principalmente ser hijo de Rivaldo. Estás demostrando ser un gran jugador y tener personalidad", explica Rivaldo ante las cámaras de 'Jugones', mandando un cariñoso mensaje a su hijo.