Tres de los grandes líderes del Barcelona, Messi, Suárez y Piqué, estuvieron juntos nada más llegar a Madrid.
Gerard Piqué fue uno de los más aclamados por los aficionados a la llegada al hotel. El defensa del Barça bajó del autobús muy concentrado y sin apenas levantar la cabeza. Messi, sin embargo, parecía más tranquilo e incluso saludó a los aficionados.
Los seguidores del Barcelona recibieron a Piqué entre cánticos de "Vamos Piqué" y "Una manita". Los seguidores también cantaron el nombre de Messi cuando vieron bajar al argentino del autobús.
Sin embargo, la cuenta oficial de Instagram del Barcelona subió un vídeo de Piqué con el rótulo de 'líder' y una taza de café al lado en la que ponía 'boss' (el jefe). La publicación deja bastante claro el liderazgo y la importancia del defensa catalán en el vestuario del Barcelona.