El mítico exfutbolista Zlatan Ibrahimovic ha recibido su merecido homenaje en Suecia tras retirarse de los terrenos de juego hace ya un año.

El sueco se despidió de la afición en un encuentro amistoso de su selección frente a Serbia. El delantero anotó 62 goles en 122 partidos con la camiseta sueca, por lo que era obligatorio rendir tributo a su carrera en el país nórdico.

Lo cierto es que Zlatan no pecó de humildad, dejando su sello personal hasta el último momento: "Hace 25 años dije que sería el mejor de todos. Mucha gente se rio. 25 años después puedo estar aquí y decir que soy el mejor de todos los tiempos".

A sus 42 años, Ibrahimovic ha querido despedirse dejando un mensaje para los más jóvenes: "A la generación más joven quiero decirles: atrévanse a soñar en grande. Si no tienes la fuerza para soñar en grande, entonces apóyate en mi viaje y saca fuerzas de él. Soy la prueba viviente de que nada es imposible, vengas de donde vengas. Espero que hayáis disfrutado de mi viaje".

Además, el exjugador quiso ganarse el aplauso del público con un último 'adiós': "Poder vestir la camiseta de la selección de Suecia es lo mejor que hay como futbolista. He llevado la camiseta con orgullo y cariño. También tuve el honor de ser capitán del equipo. Vaya, ahora siento un hormigueo en el estómago. Quiero terminar con un 'Suecia, adelante, te amo'".