El judo, arte marcial de origen japonés, lleva formando parte del listado total de deportes practicados en los Juegos Olímpicos como deporte permanente desde las olimpiadas de Múnich en 1972.
Desde entonces el judo se ha ido afianzando en los Juegos Olímpicos uniendo su disciplina femenina así como la modalidad mixta. Aunque no se sepa mucho de este arte marcial, cualquiera puede deducir que el objetivo final en esta disciplina es el de derribar al oponente empleando diferentes técnicas dentro de unas reglas mucho más complejas de lo que puede parecer este deporte.
Más allá de un combate cuerpo a cuerpo, existen diferentes técnicas para tirar al suelo al contrincante, aclamadas por los fanáticos del judo y de las cuales solo dos pueden ser empleadas en los Juegos Olímpicos de París 2024: ippon y waza-ari. Dentro de las dos, ippon es la técnica que ofrece el camino directo hacia la victoria.
Cómo se realiza un ippon
Tal y como recogen las reglas del judo para los Juegos Olímpicos de París 2024, la puntuación por ippon se concede cuando el judoka derriba a su contrincante estando de espaldas con fuerza, velocidad y control.
Del mismo modo, el ippon se puede obtener por sumisión o por inmovilización en el suelo. La clave está en sostener el movimiento y la sumisión del oponente por un mínimo de 20 segundos seguidos.
De este modo, si el judoka logra sostener el movimiento durante el tiempo necesario de manera limpia, correcta y con el control y la velocidad necesarias, obtiene 10 puntos de manera automática y el árbitro le concede el puesto de ganador del combate de manera inmediata.
Pero, ¿cómo se puede llegar a lograr un ippon? Así lo conseguía el judoka español Tristani 'Tato' Mosakhlishvili durante su pelea contra el kirguís Erlan Sherov, que le otorgaba el pase a semifinales.
Los ippon de España en los JJOO de París 2024
En estos cinco días en los que España ha ido avanzando hacia la medalla en los Juegos Olímpicos de París 2024, las competiciones de judo nos han dejado varias tácticas de ippon por parte de los judokas españoles.
El primero llegaba de parte de Francisco Garrigos, que en su -60 kg masculino obtuvo una victoria por ippon en el combate de cuartos de final contra el japonés Ryuju Nagayama.
El segundo con Laura Martínez, que vencía por ippon a la serbia Milica Nikolic. Posteriormente lo lograba también con la kazaja Abiba Abuzhakynova.
Salvador Cases lograba el lunes 29 de julio puntuar por ippon contra Faye Njie.
Mosakhlishvili volvía a puntuar por ippon contra el kazajo Erlan Sherov y aportaba el último tanto de 10 puntos en esta competición olímpica.