El maratón olímpico de Tokio dejó claras evidencias de su gran dureza. En la prueba femenina, que tuvo que adelantarse hasta una hora para evitar eo gran calor de Sapporo, hubo hasta 15 corredoras que no pudieron llegar a la meta. Una de ellas fue Laura Méndez.
Tras la carrera, la española reconoció que incluso llegó a perder el conocimiento.
"Comencé a sufrir en el kilómetro 15 y ahí me dije que había que acabar como se pudiera. Pero del 29 al 30 no recuerdo nada. Solo veía estrellitas y estrellitas, y ya desfallecí", cuenta.
Méndez reconoce que siente "rabia": "Quería acabar, pero he visto lo malo del maratón".
Fue una de las tres españolas que comenzaron la prueba. Las otras dos fueron Elena Loyo y Marta Galimnay, quienes sí vieron la meta. La primera acabó 29º, mientras que la segunda fue 37º.
Por su parte, la victoria fue para Peres Jepchirchir, keniana, quien se impuso a su compatriota Brigit Kosgei y a la estadounidense Molly Seidel.