Finalmente Marc Márquez sí será sancionado por lo ocurrido en Portimao con Miguel Oliveira, a quien mandó al suelo. También tocó a Jorge Martín en esa maniobra en la que perdió el control de su Honda. Muchas críticas ha recibido. El de Cervera pidió perdón tanto a los pilotos como a la afición portuguesa que se encontraba en las gradas del circuito. Pero sus disculpas no han desviado las críticas.
Aprilia, el equipo de Oliveira, ha emitido un comunicado pidiendo "sanciones más duras": "El CryptoDATA RNF MotoGP Team condena tal comportamiento y aboga por sanciones más duras para disuadir a futuros infractores, incluidos los propios pilotos del equipo".
"Instamos a los FIM Stewards a tomar medidas rápidas y decisivas contra este tipo de conducción temeraria, dando ejemplo a los pilotos más jóvenes y futuros de Moto3 y Moto2", dice la nota.
Cree que ese accidente debe ser tratado como un "toque de atención": "El incidente ocurrido en la carrera entre Marc y Miguel debería servir de llamada de atención para los pilotos de MotoGP, Moto2 y Moto3. Es imperativo que se les remarque la contundencia del castigo por cualquier tipo de conducción imprudente e irresponsable".
"Las carreras son de alta velocidad y alta intensidad en las que todos los pilotos quieren ganar a toda costa. Sin embargo, este comportamiento agresivo a menudo puede tener consecuencias nefastas, no sólo para los propios pilotos, sino también para el resto", sentencia el comunicado.
Márquez tendrá que cumplir la sanción doble'long lap' cuando se recupere de su fractura en la mano derecha y regrese a la competición. Esta penalización consiste en hacer una trazada alternativa en una curva concreta de cada circuito, perdiendo entre dos y cuatro segundos. Además, deberá cumplirla en las primeras vueltas de carrera.
