Aston Martin ha cumplido. Lo dijeron. Por activa y por pasiva. Dijeron que iban a pelear de nuevo por los podios. Que iban a estar en la lucha por la victoria. Que iban a volver a plantar batallaa Red Bull. Y sí, sí que lo han hecho. El AMR23, en Países Bajos y en manos deFernando Alonso, voló en Zandvoort para alcanzar la segunda plaza y regresar al cajón.
Para volver a saborear el champán, algo que no pasaba desde Canadá. Desde hace mucho. Desde hace demasiado. Desde hace bastante tiempo. Porque poco a poco fue bajando el suflé. Porque iba hacia atrás. Porque parecía que el color verde iba a dejar paso al naranja de McLaren. Pero no, no ha sido así en Países Bajos.
Porque Aston Martin ha reaccionado. Y cuando Alonso tiene coche, cuando siente confianza, pasa lo que pasa. Primero, una espectacular salida en la que adelantó a dos coches para ya colocarse en podio. Luego, adiós Lando Norris. Y ya al final, a por Verstappen.
Carrera movida eso sí, con lluvia y cambio de gomas. Con varias paradas en boxes. Con un tercer cambio que no salió del todo bien. Se sobrepuso. Volvió a exhibir ritmo y de nuevo a puestos de podio. Sergio Pérez, saliéndose de pista, hizo el resto.
Al final,piloto del día y una radio que pone el sufléde nuevo en lo más alto.
Así vivimos la vuelta al podio de Fernando Alonso en la F1.