Adrian Newey, uno de los ingenieros más prestigiosos de la Fórmula 1, es considerado el mayor estandarte de Red Bull y una figura clave para el dominio de la marca en F1. El británico ha trabajado en equipos como Williams o McLaren, incorporándose a la escudería austríaca en 2006.

En Red Bull ha conseguido consagrarse como uno de los mejores ingenieros de la historia del 'Gran Circo', siendo el artífice de los cuatro campeonatos de Sebastian Vettel y del aplastante dominio de Red Bull durante las últimas dos temporadas.

Este éxito ha provocado que los ojos de muchos equipos se fijaran en el ingeniero, entre ellos Ferrari. La escudería italiana ha intentado fichar a Newey en varias ocasiones, aunque sin mucho éxito.

Sin embargo, Newey admite el misticismo de los italianos: "Ferrari es una marca mágica y creo que todos en el automovilismo estarían fascinados. Cuando surge la oportunidad de hacer el cambio, creo que todos se sentirían tentados. Ya me han contactado tres veces y he estado muy cerca de hacer el cambio".

"Es una gran marca, con mucha mística. Es básicamente la selección italiana, con todos los pros y los contras que eso conlleva", afirma el ingeniero en el podcast 'Formula For Success'.

A día de hoy, resulta difícil imaginar a Newey en otro equipo que no sea Red Bull, aunque el británico mantiene la puerta entreabierta: "He disfrutado trabajando en Red Bull desde el principio. Es el equipo en el que he estado más estrechamente involucrado en la configuración de la parte de ingeniería, así que me siento cómodo allí. Conocemos cómo trabajamos".

"Cambiar de equipo ahora sería como dejar a tu familia. Así es como veo a Red Bull ahora. Pero no estoy diciendo que nunca cambiaré, nunca deberías decir eso", concluye Adrian Newey.