Desde que sufriera un durísimo accidente mientras esquiaba en diciembre de 2013, el estado de salud de Michael Schumacher es una auténtica incógnita.
La familia del 'Káiser' ha pedido en repetidas ocasiones que se respete su intimidad y han tratado de proteger al máximo al alemán.
Sin embargo, un antiguo empleado de seguridad de los Schumacher trató de aprovecharse de la situación.
El hombre contactó con un portero de discoteca y su hijo para que extorsionasen a su familia con fotos y vídeos de Michael si no pagaban un montante que ascendía a los 15 millones de euros.
Las autoridades alemanas tiraron del hilo de las amenazas y detuvieron en junio al padre y al hijo, incautando 1.500 documentos, entre fotografías, vídeos e informes médicos del alemán en discos duros, memorias USB y teléfonos móviles.
Posteriormente, después de que el portero de discoteca confesara quién les había proporcionado el material audiovisual, la policía procedió a detener al exempleado.
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Ahora, la Fiscalía de Wuppertal ha presentado cargos contra los tres investigados por extorsionar a la familia de Michael Schumacher.