Adrian Newey es una de las personalidades más importantes e influyentes en el mundo de la Fórmula 1. Y es que Newey ha sido una de las piezas clave del éxito de Red Bull todos estos años, pues es el artífice principal de todos sus monoplazas.

Es por ello por lo que muchas escuderías han tratado de hacerse con sus servicios ofreciéndole cantidades de dinero estratosféricas. Es el caso de Ferrari que, en busca de una necesidad imperiosa de volver a ganar en el 'Gran Circo', le ofreció al británico incluso vuelos directos entre su casa y la fábrica.

Así al menos lo ha confesado Christian Horner, jefe de equipo de la marca de las bebidas energéticas, a través del portal italiano 'Formula Passion': "Ferrari le había buscado con insistencia".

"Le prometió el mundo, un estilo de vida 'hollywoodiense' en Montecarlo, vuelos directos entre la fábrica y el Principado... E incluso la posibilidad de construir un coche de calle", ha explicado el mandamás.

Asimismo, Horner asegura cuál fue el matiz que decantó al ingeniero para quedarse en Red Bull: "Dietrich Mateschitz le convenció para que se quedara: 'Si quieres hacer un coche de carretera, lo haremos'. Mateschitz no tenía ni idea de cómo, pero dijo que encontraría la manera".

Precisamente de ese trato nació el famoso Aston MartinValkyrie, un coche de calle fabricado por el propio ingeniero y que, casualmente, es uno de los nuevos coches de Fernando Alonso.