McLaren sumó un doblete en Hungría. Uno, liderado por Oscar Piastri en la primera victoria del australiano en la F1. Uno que, a pesar de que debería ser siempre motivo de felicidad y alegría, tuvo un punto amargo. Uno forzado. Uno que podía haberse evitado. Porque los de Woking casi la lían con un 'undercut' de Lando Norris al oceánico que arreglaron luego en las radios.

Más o menos, porque la ración de comunicaciones fue un espectáculo. Fue lo que animó el final de Hungría. Nadie sabía si Lando iba a ceder o si no, sabiendo que está jugándose el Mundial. Nadie sabía si él iba a decir 'sí' o si, como Lance Stroll, iba a saltarse las órdenes de equipo. Pero sí, cedió en cuanto le dijeron que el título no se puede ganar solo.

Que va a necesitar del equipo, de Piastri, si quiere lograr el campeonato de pilotos. En ese momento, Lando soltó el pedal del acelerador para 'perder' los seis segundos de ventaja que tenía con Piastri.

En McLaren, lógicamente, han tenido que dar explicaciones sobre lo sucedido... pero no está del todo claro todavía.

"Los neumáticos se degradaban mucho"

"No queríamos entrar en boxes pronto, porque los neumáticos se estaban degradando mucho y no queríamos quedarnos sin gomas al final, por si Verstappen era un problema", afirma Andrea Stella.

Lo cierto es que Norris hizo su parada en la vuelta 46, con 24 todavía por disputarse, y que Verstappen ni tan siquiera pisó el podio tras un accidente con Hamilton. Stella, en ese sentido, insiste en su idea.

"Solo queríamos retrasar la parada, y además siempre puedes tener un problema en el 'pit lane' y hay que ir sobre seguro. No quiero que la responsabilidad recaiga sobre Norris y Piastri", dice.

Y prosigue: "Prefiero asumir la responsabilidad y asegurar un doblete. Luego ya gestionaremos todo con los pilotos".

"Había riesgos que no queríamos correr. No debimos quedarnos detrás de Hamilton y de Ferrari, en ningún momento", cuenta.

Para terminar, es claro: "Sería arrogante tomar este resultado tan positivo y no ver que pudimos hacerlo mejor".