Carlos Sainz fue uno de los más destacados en la carrera del GP de Gran Bretaña. El madrileño fue el único Ferrari en sumar en Silverstone, con un quinto puesto final que le dejó satisfecho por el gran ritmo que demostró el monoplaza rojo. Por un ritmo que incluso impresionó a Max Verstappen.

El neerlandés, segundo, reconoció en la ceremonia previa al podio con Lewis Hamilton y Lando Norris que, directamente, alucinó con cómo se manejó Carlos con el coche cuando las primeras gotas cayeron en Silverstone.

Cuando llovía, pero no tanto como para que los neumáticos intermedios demostrasen su fortaleza en esas condiciones. Cuando lo más probable era fallar.

En ese momento, Sainz sacó lo mejor de sí mismo, tal y como cuenta Verstappen con un esclarecedor ejemplo.

"Le tenía a cinco o a seis segundos. De repente miro al retrovisor... y estaba justo detrás. ¡Wow!", compartió Max con sus compañeros de podio.

Porque sin duda alguna Sainz, como dijo, era lo que era en Silverstone: "En esas vueltas, Carlos era muy rápido".

Sigue sin equipo Sainz para 2025. El madrileño se lo está pensando y, cuando ya estamos en julio, aún no se ha decantado por ninguna de las propuestas que podría tener en la mesa.