Es evidente que no hay muchas cosas que puedan hacer tambalear los cimientos de Red Bull. El dominio de la escudería durante los últimos años así lo demuestra. Tan solo la denuncia por parte de la ya exempleada de la marca por 'conducta inapropiada' de Christian Horner puede desencadenar una tormenta en Milton Keynes.
Tras el respaldo de los austriacos al que lleva siendo su jefe de equipo desde 2005, la familia Verstappen salió a la carga en busca de la 'cabeza' de Horner. Este revuelo ha encendido la mecha de las especulaciones, surgiendo rumores que sitúan a Max Verstappen en Mercedes.
Tras la ya firmada salida de Hamilton de la escudería alemana al término de este año, Toto Wolff no se ha escondido a la hora de afirmar estar encantado con la posibilidad de fichar al neerlandés. Sin embargo, otros, como el campeón del mundo de 1997 Jacques Villeneuve, ven más una cortina de humo en esta estrategia de Wolff.
"No puedo verlo en Mercedes (a Verstappen) porque perdieron el campeonato ante Red Bull y Max. Definitivamente no sería porque realmente quisiera a Max, es solo para molestar a Red Bull. Max está ganando porque tiene un coche increíble y Red Bull está ganando porque tiene un piloto increíble. Pero él no es el único piloto increíble que existe. Pon a Alonso en ese coche y él también ganaría", señaló el canadiense.
El expiloto mantiene que aún existen venganzas personales entre Red Bull y Mercedes y que esta estrategia de los de Brackley no hará más que desestabilizar a la marca de bebidas energéticas. Lo cierto es que resulta complicado imaginar a Red Bull sin Horner o sin Verstappen, aunque el canadiense defiende que Max podría ganar en cualquier sitio.
"Estoy seguro de que Max cree que podría ganar en Mercedes y Ferrari también. Pero eso es algo que no sabremos hasta que haga ese movimiento. Ahora mismo, está venciendo a Pérez y eso lo hace lucir increíble. Pero no sabemos qué tan bueno es realmente Pérez. Sólo sabemos que no es tan bueno como Verstappen", sentenció.
Su padre, indignado
Obligan a un niño de cinco años a quitarse la camiseta del Espanyol para poder entrar en el campo del Girona
"El bebé se ha tenido que quitar la camiseta del Espanyol porque dicen que con ella no puede entrar. Terriblemente peligroso. Pueden morir todos. Un niño de cinco años", se escucha decir a su padre.