De nada vale un gran comienzo si se falla al final. De nada le sirvió a Hamilton ser el mejor en la Q1 y en la Q2 si en la Q3, en el momento en que se decide la pole, se va por fuera de la pista por ese ADN de campeón que tiene. Pero así fue, así le sucedió a un Lewis que vio cómo perdía en un mal segundo sector una pole en Rusia que parecía suya. Bottas, perfecto, le 'arrebató' la pole a su compañero, pero Mercedes tiene la primera línea de una parrilla con Vettel tercero y Raikkonen cuarto.
Los plateados no tuvieron rival alguno en Sochi. Volaban, y en Ferrari pocas soluciones encontraban en un garaje en el que cada vez más claro parecía, tras los Libres, que deberían conformarse con estar en el retrovisor de Mercedes. Si había dudas, Hamilton las despejó en la Q1.
El británico estuvo excelso, y en Q2 incluso tuvo que frenar en el tercer sector para evitar salir con unos neumáticos equivocados en la jornada dominical. Sin embargo, le pudieron las ganas en Q3. En el segundo sector tiró por tierra su pole. Primero, con un error leve, y segundo con uno más grave en el que se fue por fuera de pista con el Mercedes. Ante eso, Bottas tuvo el camino despejado. Y Vettel, tercero, con el cuchillo entre los dientes sabiendo que o arriesga o pierde.
Y McLaren, a lo suyo. Prometieron mejores resultados con Renault que los obtenidos con Honda... pero no. Y eso que el comienzo en Australia fue prometedor, pero la evolución del monoplaza lejos de ir hacia arriba ha ido hacia abajo. Como Sauber, pero al revés. y en Rusia ha quedado claro que este MCL33 es igual de 'bueno' que sus predecesores.
Años llevan a la deriva. Incluso con Mercedes de motorizador. En Sochi, Fernando Alonso y Stoffel Vandoorne no se mostraron competitivos. Lo esperado, pero para una escudería con la historia de McLaren no ser competitivo es un fracaso. Mientras Mercedes y Ferrari se divertían en pista, en Woking veían todo desde la televisión.
Ahí estaban Alonso y Vandoorne, compitiendo por no ser últimos con unos Williams que se movían de forma nerviosa, y peligrosa, por el asfalto. Fernando fue 17º, y Stoffel 19º. Y así está McLaren en el Mundial 2018 a falta de pocas carreras para su final.
Salvo sorpresa mayúscula, Carlos Sainz se va a encontrar una buena 'fiesta' en McLaren. Por fortuna todo lo que pase será, o debería ser, mejor que lo que está pasando este año. Con el Renault, en Sochi, el madrileño superó con apuros la Q1 y ni salió en Q2. No se veían capaces desde el garaje amarillo de batir a los Haas, a los Force India y a los Sauber. Y con la de kilómetros que llevan las unidades de potencia mejor es ahorrar.
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Carrera difícil la que les espera a McLaren y a Renault en este circuito de Sochi. Mientras ambas escuderías encuentran, y recuperan, su sitio, Mercedes ha allanado el terreno para que Lewis Hamilton conquiste su quinto Mundial. Pero los puntos se reparten los domingos, y cuántas veces parecía que Vettel ganaba de calle para terminar irse con un cero... El Gran Premio no ha hecho más que comenzar.