Red Bull se encuentra en una situación peliaguda en la que la bajada de rendimiento no ha sido el único problema que han tenido que afrontar. Con McLaren pisándole los talones y con los recientes problemas de fiabilidad que ha tenido el coche, tendrán que continuar 'remando' si quieren volver a estar delante.

También a esto hay que sumar la salida de Adrian Newey y las tensiones internas dentro del equipo, que además de haber creado inestabilidad en la escudería, podrían haber sido uno de los detonantes de la perdida de rendimiento de los de Milton Keynes.

Recientemente ha vuelto a ocurrir una situación que parece haber alimentado la guerra interna que hay en Red Bull entre los Verstappen junto a Marko contra Christian Horner. Al parecer, según ha contado el padre de Max Verstappen, Horner habría hecho todo lo posible por negarle la participación en un evento.

"Pero en los últimos días he oído de varias fuentes que Christian Horner ha hecho todo lo posible para no dejarme conducir. Y, por lo demás, para garantizar que no se filmara nada. Entonces pienso: dímelo en la cara. Esto no es necesario para mí, lo encuentro muy decepcionante", ha expresado Jos Verstappen en el 'paddock' del GP de Austria.

Si Red Bull quiere volver a lo más alto tendrán que solucionar sus diferencias, o al menos actuar como un equipo. Situaciones como esta son las que acaban creando más división dentro de la escudería, por lo que lo único que hace falta será esperar.