La Fórmula 1 regresa a China cinco años después tras la pandemia por el coronavirus. Y todo son incógnitas. Sobre todo el asfalto. Es la gran preocupación de los equipos. Y en concreto del jefe de la escudería Ferrari, Fred Vasseur.
El jefe de Carlos Sainz y Charles Leclerc apunta que será "difícil" para todos en la parrilla: "Creo que será difícil, pero si es difícil para todos, entonces todos estaremos en la misma situación".
"El mayor interrogante para mí será el asfalto, porque conocemos el trazado de la pista. La mayoría de la gente sabe que el mayor interrogante para mí será el asfalto y probablemente, en comparación con la última prueba, tenemos condiciones más frías. No conocemos la dureza del asfalto, esto será clave para el fin de semana", detalla el jefe del equipo de Maranello.
"Lo que es un poco difícil con el formato de China es que con la asignación de neumáticos y una sesión de entrenamientos, tenemos que elegir el plan al que estamos vinculados en el coche", indica Vasseur.
Y los primeros entrenamientos serán claves: "A juzgar por el viernes, la anticipación del fin de semana es decisiva".